Puede no ser más que una idea desesperada.
Y eso de sumergirse en el terror sintético
De tus labios decadentes y estúpidos
Está pasando un poco a la historia.
No me apetece contar pétalos secos
Ni recoger granos de arroz del suelo encharcado
Porque lloras por vicio y por reputación.
Yo lloró porque no puedo hacerte cambiar.
Por vicio ni por reputación es bueno llorar, que eso es de las copleras.
ResponderEliminarbesitos Jorge, commme d'habitude me encantan tus poemas...